Ariel Liberatti

Muerte

el ramaje ausente
viento libre en devenir
bosque en fuga
trina como llanto
entre las horquetas secas
el rio y las flores lloran de lejos
como inmigrantes de posguerra
esos pájaros del monte
que ya no cantan
gritan en reclamo riguroso
como una protesta proletaria
piden alas más grandes
para sus vuelos inciertos.
espejo de laguna seca
con tristes espinas de vaya a saber que pez
cae en cruz,
marcando un destino
solemne destino,
que no es mas que la muerte

Casero de calle Uruguay

En el caserón de calle Uruguay
maxi hace magia, atrapa el tiempo
lo deja quieto Yo lo miro
Se acaricia su barba rala
me dice que espere
Trae un pingüino
lo llena a media astilla
Le mete distintas pócimas
todas saben rico
Dice que es por el aire
Mientras comemos lee poesía
villera
Yo no digo nada
no lo quiero interrumpir
Al lado mío esta león es un gato gris
Me grita
ataca
reclama vaya a saber que
lunes caen
para siempre
inmóvil
dentro del cosmos
mientras nos juntemos
maxi, león y yo
A reclamar vaya a saber qué.

Cenit

soy una astilla que vuela
sobre estos ríos Siglos de andar
perder el encierro vertiginoso
Socavones
que miran al sur
olvidados
como una quilla en la arena
fui un silbido que fecunda tierra adentro
en la lucha vaga por llegar
al sol
me encontraron muerto
en el cenit del día

Búsqueda vaga

Hoy te busque
En el olor a jipi del sillón del hostel donde chocamos.
Recordé tus ojos de almendras con chocolate.
Nos vi andando por Arístides fumados perdidos
en medio de la noche
custodiados por las copas añosas de los arboles.
Dos cruces ahí
bajo la luna.
Los días se volvieron cimarrones y me van devorando,
extraño el vino en vasitos plásticos, Bailar hasta caer.
Acá la gente es fría.
No hablan de la Maga.
No se tiran boca arriba al sol.
El mundo se enfría nena,
el viento trae un rumor
de flores sintéticas
y el golpe de tu voz se va,
siempre se va.

 

 

Ariel Liberatti

Nací en rosario en 1985 y me crie en granadero Baigorria, actualmente resido en coronel Domínguez a 20 km de Rosario. El aire libre y el río es donde más cómodo me siento. Totalmente analógico. Escribo desde que en el mundo se desató una pandemia. El arte tanto música, foto y escritura son una terapia para mí.